Los perros de refugio siempre están tristes porque no reciben mucho amor de los dueños. Por lo tanto, nadie puede imaginar lo agradecido y feliz que es un perro de refugio cuando consigue un hogar amoroso donde puede vivir una gran vida con sus humanos que lo aman incondicionalmente.
Conozca a Russ, un pitbull de 4 años que encontró su hogar en los brazos amorosos de Kayla Filoon, una estudiante que se ofreció como voluntaria como paseadora de perros en ACCT Philly, un refugio de animales en Filadelfia. Kayla estaba acostumbrada a pasar tiempo con perros sin hogar, pero cuando conoció al perro triste con pelaje irregular, supo que había algo especial en Russ detrás de su apariencia áspera.
“Llegó como un vagabundo y estaba realmente golpeado”, dijo Filoon a The Dodo . “Le faltaba pelo en la cola y las orejas. También estaba terriblemente flaco. Me dijeron que pesaba alrededor de 40 libras cuando llegó al refugio”.
Filoon se preguntó cómo el dulce perro Russ terminó en el refugio en tan malas condiciones. “Él fue muy cariñoso conmigo, incluso cuando salimos al patio”, dijo Filoon. “Parecía un perro tan dulce, y no ladró a ninguno de los otros perros”.
Con la ayuda del personal del refugio, rápidamente organizó sus papeles de adopción. “Lo llevé a casa esa noche”, dijo Filoon.
Russ tardó un poco en acostumbrarse a su nuevo entorno y rápidamente se enamoró de su nueva vida, especialmente de su nueva mamá, Filoon. “Él siempre tiene que estar cerca de mí”, dijo.
“Es un insecto amoroso, honestamente”, dijo Filoon. “Estaré acostado allí, y él pondrá su cabeza debajo de mi brazo, o su pata sobre mi pecho. E incluso se recostará sobre mi pecho”.
El amigo de Filoon les tomó una foto y la compartió en las redes sociales. La imagen rápidamente se volvió viral y Filoon espera que la foto inspire a otros a ayudar a estos animales del refugio a encontrar familias amorosas y nuevos hogares.
En el momento en que Filoon llevó a Russ a casa, supo que era el perro perfecto.
Él no deja de abrazarla y acurrucarse con ella.
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