La vida está llena de gente maravillosa, y hay quienes no tienen miedo de sacrificar sus vidas para salvar a los demás. En este artículo, estamos mencionando y rindiendo homenaje a uno de los trabajos más increíbles del mundo, bombero. Con un gran corazón y abundante entusiasmo, los bomberos se han precipitado innumerables veces en incendios peligrosos para proteger la vida de los demás. Sus trabajos son verdaderamente significativos y los admiramos. Por lo tanto, ahora estamos muy emocionados de compartir con ustedes la conmovedora historia de un valiente bombero. Aparte de las historias sobre bomberos que salvan a personas, creemos que esta es una historia muy especial, ya que el rescatado esta vez no es una persona sino un pequeño perro.
Fuente:billy fernando
En California, un edificio de apartamentos se incendió y, desafortunadamente, una mujer y su pequeño cachorro llamado Marley quedaron atrapados dentro. Inmediatamente, el Departamento de Bomberos de Santa Mónica apareció en escena para iniciar su misión.
Billy Fernando , un experto fotógrafo de retratos, pasaba en ese momento y notó que los bomberos corrían hacia la estructura en llamas. Tomó la intrigante decisión de detenerse y observar las operaciones de rescate. Y vio a Andrew Klein, un valiente bombero que luego se convirtió en un héroe memorable por sus siguientes actos.
Fernando recordó cómo vio a Andrew corriendo hacia el área de césped cerca de la calle mientras cargaba un objeto desconocido. Y no fue hasta más tarde que Fernando se dio cuenta de que el objeto era una mascota atrapada en el fuego. El pobre animal estaba inconsciente, sin vida y sin responder.
Aunque el perro estaba siendo reanimado con una máscara de oxígeno, era obvio que se necesitaba una acción más urgente. Después de un minuto, Klein realizó con valentía la reanimación cardiopulmonar en el animal, que fue un momento impresionante, según Fernando.
Con el paso del tiempo, la condición de Marley mejoró y comenzó a recuperar sus fuerzas. Estaba claro que ya no estaba en peligro inmediato, a pesar de que parecía un poco confundido.
Todos los asistentes quedaron encantados con el resultado, y el dueño del negocio se echó a llorar. Para Fernando, estar presente en este momento fue un verdadero honor. A pesar de que salvar vidas puede ser un trabajo de rutina para Klein y otros socorristas, sus esfuerzos para ayudar al pequeño perro serán recordados durante mucho tiempo.
