Compartir la cama con mascotas es bastante común, pero ¿alguna vez has oído hablar de una familia que se turna para dormir en el sofá solo para hacerle compañía a su perro? Permítanme contarles esta conmovedora historia sobre Spike y la maravillosa conexión que tiene con su familia.
Su dormitorio está en el segundo piso, lo que lo hace inaccesible para Spike. Pero nunca dejó de intentarlo, aunque su frágil estado lo hacía difícil. Al final, tuvieron que bloquear las escaleras para mantenerlo a salvo.
Pero aquí es donde se vuelve adorable: si Spike no podía subir a dormir con ellos, ¡decidieron bajar y dormir con él!
Ahora, la familia se turna para instalar el sofá cama y pasar la noche abajo con Spike, asegurándose de que el viejo perro nunca esté solo.
Un día, Catherine regresó de la universidad y descubrió el nuevo lugar para dormir de sus padres. Sin embargo, no la sorprendió: su familia siempre ha compartido un vínculo especial con Spike.
“Son absolutamente inseparables”, explicó Catherine. “Mi papá lo llama ‘viejo frijol’ y siempre están charlando”.
“Mi papá también le llevará a Spike su agua y comida al sofá y lo alimentará con la mano para asegurarse de que reciba sus medicamentos y mantenga sus fuerzas”.